Floridablanca es el único municipio del mundo, sí, del mundo, que, frente a su parque principal y a escasos metros del palacio municipal, tiene no una, ni dos, sino TRES plazas de mercado.
En la parte oriental, entrando por la carrera novena, funciona la Plaza de Mercado Campesina; por la calle sexta está ubicada la Plaza de Mercado Central, y por la carrera octava a lo largo del andén, otra plaza de mercado al aire libre ocupa el espacio público obstaculizando el desplazamiento de transeúntes.
Lógico es, que, entre los resultados de la comercialización de alimentos a gran escala, los desechos sean abundantes y por su errada manipulación, terminan arrumados en el parque convertidos en ración apetecida para aves carroñeras.
Ahora, este nauseabundo y denigrante espectáculo que nos muestra la foto, lo estamos viendo en época de pandemia, cuando supuestamente las ventas han bajado. Cómo será durante el diario y normal vivir cuando el turista nos visita, degusta una deliciosa oblea con suculento arequipe y al dar una vuelta por el parque, termina expulsando violentamente por la boca su contenido estomacal. O sea, vomitando. (Gerardo Castro Pérez)