
Metrolínea canceló dos meses de salario a sus trabajadores. Foto: Archivo
Las cifras que muestra la gerente de Metrolínea, Emilcen Jaimes Caballero, sobre la empresa no son nada halagadoras.

El sistema arrastra deudas de administraciones anteriores, enfrenta problemas estructurales y tiene un déficit, en este momento, equivalente a los 36.000 millones de pesos.
Los trabajadores de Metrolínea reclaman quincenas laborales atrasadas y la situación se ha visto agravada con la pandemia, que prácticamente obligó a la empresa a trabajar con la cantidad de usuarios mínimos, lo que no garantizar la estabilidad de la operación financiera.
En menos de tres meses, los trabajadores de la empresa de transporte masivo han cesado sus labores en dos oportunidades, como medida de presión. Y para el venidero 17 de noviembre han anunciado otro cese de operaciones en reclamo de las quincenas pendientes, que son muchas por lo visto.
Esperan aportes de Floridablanca y Piedecuesta
La gerente explicó, a propósito de la crisis financiera de la empresa, que la alcaldía de Bucaramanga ha venido haciendo aportes significativos para apoyar a Metrolínea.

Y solicitó el apoyo de las administraciones locales de Floridablanca y Piedecuesta para hacer más sostenible la operación financiera.
De manera específica, dijo que los concejos municipales deben aprobar los recursos que las respectivas alcaldías destinen a la empresa Metrolínea.
Dejó claro que los dos municipios también deben apoyar la operación financiera de la empresa, por cuanto Metrolínea también sirve a Floridablanca y Piedecuesta.
No hay mantenimiento de unidades
La situación crítica por la que atraviesa Metrolínea fue confirmada por uno de los choferes que presta servicio en el municipio de Piedecuesta.
Solicitó a Ciudad Florida el anonimato, pero dijo que las unidades no tienen mantenimiento por la misma falta de recursos. Ratificó las deudas relacionadas con las quincenas y en términos generales dijo que “…los usuarios ignoran las condiciones en ellos laboran en la empresa”.