
Misael Salazar F.
La Conectante C1-C2, que formaba parte de la Megavía 4G Bucaramanga-Pamplona, ya no va.
El pasado viernes, 17 de mayo, se firmó el acuerdo de terminación anticipada del contrato entre la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) y el Consorcio CSS que estaba a cargo de la Megavía, que incluía la Conectante C1-C2.
La información, suministrada por el portal de noticias de economía (Valora Analitik), da cuenta de una terminación anticipada del contrato de la Megavía, básicamente por dos razones:
La primera, por el escaso avance de la obra (11 %), en 8 años, debido a problemas surgidos por la vinculación entre el representante del Consorcio CSS Constructores, representada por Carlos Alberto Solarte, con la firma brasileña Odebrecht, lo que dejó descapitalizado al consorcio ocasionando retrasos en su construcción.

El alto daño ecológico hizo que la comunidad de Floridablanca nunca apoyara la obra de la Conectante
Segundo, por los problemas surgidos con la Conectante C1-C2, a cargo de Autovías Bucaramanga-Pamplona, consorcio que tampoco respondió por la obra, generando un elevado daño ambiental y un retraso considerable en la construcción de dicho tramo.
Este tramo, la Conectante C1-C2, enfrentó, además, un gran rechazo por parte de los movimientos ambientalistas de Floridablanca, que dejaron al descubierto el daño ecológico con la tala de 5.000 árboles de los cerros orientales de Floridablanca, el pulmón natural del municipio dulce.

La no socialización y el alto impacto ambiental, adicional a las fallas estructurales en la elaboración técnica del proyecto, prácticamente hicieron inviable la Conectante C1-C2, que al final también influyó para la terminación anticipada de la Megavía 4-G Bucaramanga-Pamplona.
Valora Analitik cita al propio presidente de la ANI, Francisco Ospina, como fuente de la información respecto a Megavía y la Conectante C1-C2, que ya no van más por las razones expuestas.