Misael Salazar F.
La eliminación de las sanciones económicas por parte de Estados Unidos a Venezuela, ha permitido que más de media docena de empresas petroleras del mundo empiecen acercamientos con PDVSA para participar del negocio petrolero.
Existen al menos dos razones de peso para entender como las petroleras China Petroleum e Indian Oil, además de la española Repsol, la italiana ENI, la colombiana Ecopetrol, la francesa Maurel and Prom y Shell y Mitsubishi atienden el llamado del gobierno venezolano a invertir en la explotación de sus campos petroleros y gasíferos.
La primera es que cada vez se necesita más petróleo y gas, las principales fuentes energéticas del planeta. La guerra de Ucrania y las consecuentes sanciones a Rusia por parte de Estados Unidos y Europa, hizo que Putin perdiera gran parte del mercado que abastecía con su petróleo. Estados Unidos fue el primero en renunciar a la cuota petrolera que le llegaba todos los días precedente de Rusia. Hay que suplir las cuotas que le pertenecen al gigante ruso.
La segunda razón es que Venezuela posee las mayores reservas estratégicas de petróleo pesado y extrapesado del mundo, estimadas en 300.000 millones de barriles.
Es obvio que allí está el petróleo que necesita el planeta para los próximos 100 años, mientras que Colombia, por ejemplo, solo tiene reservas de petróleo y gas para 7 años.
Cada vez el mundo consume más petróleo y gas. Incluso para los planes de la denominada transición energética, se necesitará el gas, aunque suene paradójico.
El levantamiento de las sanciones a PDVSA se produjo luego de los acuerdos de Barbados entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición venezolana.
Estados Unidos se compromete a aliviar las sanciones económicas que afectan al gobierno de Nicolás Maduro y a la economía venezolana. Maduro, por su parte, se compromete a facilitar elecciones presidenciales libres, liberar presos políticos y eliminar las sanciones que impidan a los líderes políticos venezolanos participar en el proceso electoral del año 2024.
La participación de estas empresas en el mercado petrolero venezolano, facilitará que el país vecino aumente su producción petrolera en unos 300.000 barriles diarios el año entrante. Ello elevará la producción total de petróleo venezolano en 1.000.000 o 1.100.000 barriles diarios. Actualmente, Venezuela produce entre 700.000 y 800.000 barriles diarios, cifra casi similar a la que produce Colombia.
